Ahir la Natàlia es va fer un piercing. Va ser un dia llarg. D’aquells dissabtes que comencen amb una sola decisió plena de tentatives.
Una de lles idees era visitar la Magie Hambling. L’única referència que en tenia era una imatge al diari, ahir acabava la seva exposició. Era una oportunitat per veure-la a la galeria Malborough al carrer Orfila de Madrid, un carrer paral.lel a Génova. Era tard quan ja tornavem a casa, tot passant per davant de la seu d’un partit polític un pensa que la propagando ideològica es converteix en una representació simple, lluny de les sensacions ens ho venem tot a les imatges que ens identifiquen, ho simplifiquem per no perdre i clar ho perdem tot. La feblesa de la idea individual feta col.lectiva.
Sólo inmerso en la masa puede el hombre redimirse de este temor al contacto. Se trata de la única situación en la que este temor se convierte en su contrario. Es esta densa masa la que se necesita para ello, cuando un cuerpo se estrecha contra otro cuerpo, densa también en su constitución anímica, es decir, cuando no se presta atención a quién es el que le «estrecha» a uno. Así, una vez que uno se ha abandonado a la masa, no teme su contacto. En este caso ideal todos son iguales entre sí. Ninguna diferencia cuenta, ni siquiera la de los sexos. Quienquiera que sea el que se oprime contra uno, se le encuentra idéntico a uno mismo. Se le percibe de la misma manera en que uno se percibe a sí mismo. De pronto, todo acontece como dentro de un cuerpo. Acaso sea ésta una de las razones por las que la masa procura estrecharse tan densamente: quiere desembarazarse lo más perfectamente posible del temor al contacto de los individuos. Cuanto mayor es la vehemencia con que se estrechan los hombres unos contra otros, tanto mayor es la certeza con que advierten que no se tienen miedo entre sí. Esta inversión del temor a ser tocado forma parte de la masa. El alivio que se propaga dentro de ella (y que será tratado en otro contexto) alcanza una proporción notoriamente elevada en su densidad máxima.
Masa y Poder
Elias Canetti
La representació com a identificació, com desar tota interpretació perquè el que haviem de veure ja ha estat vist. Es la propaganda aquesta imatge desitjada, que assenyala i t’evita l’incertessa.
Poca cosa més a dir, quan els valors es confonen amb els valors personal, de la mateixa manera que les ideologies identificades amb idees polítiques eviten qualsevol disidència per por a l’altre. Una A de superheroina per representar una sola idea